Nadie como tú me ayuda a caminar, me aparta del dolor.
Nadie como tú para hacerme reír, nadie como tú sabe tanto de mi, nadie como tú es capaz de compartir mis penas, mis tristezas, mis ganas de vivir. Tienes ese don de dar tranquilidad, de saber escuchar, de envolverme en paz. Tienes la virtud de hacerme olvidar el miedo que me da mirar la oscuridad. Solamente tú me puedes entender.